CÓMO INFLUYE EL CORONAVIRUS EN LA OPTIMIZACIÓN DE UN NEGOCIO DIGITAL
La aparición del Coronavirus, más conocido como Covid-19, no sólo ha supuesto un drástico cambio en los comportamientos y usos diarios de nuestras vidas. También ha generado una ruptura en todos los negocios sin distinción de sectores.
ES AHORA CUANDO SE DIFERENCIAN Y RESALTAN AQUELLOS NEGOCIOS QUE APOSTARON EN SU DÍA POR UNA SERIE DE MEJORAS EN EL ÁREA DIGITAL.
Del mismo modo ha forzado a toda la población a adecuar nuestro estilo de vida, viéndonos confinados en nuestro hogares, pero teniendo las mismas necesidades básicas que cubrir.
Es ahora cuando se diferencian y resaltan aquellos negocios que apostaron en su día por una serie de mejoras en el área digital y apostaron, además, por conocer bien a sus clientes. Escucharles, comprenderles y ofrecerles soluciones reales.
Hablamos de mejoras considerables y no de las que se llevan a cabo consecuencia de ser arrastrados por el “todos están ahI” o similares.
Desde el inicio del confinamiento en domicilios, varios negocios han modificado parte de su modelo de negocio para poder realizar VENTA ONLINE y minimizar pérdidas, resultado del descenso de ventas que se ocasiona el no poder acudir a establecimientos.
No se trata de realizar ahora un “marketing en tiempos de coronavirus” (algo que no es real). Se trata de haber realizado antes el marketing efectivo que debería haberse ejecutado.
Por lo tanto, los diferentes factores que influyen en los negocios digitales derivados del confinamiento, son los mismos que existían antes, pero con leves modificaciones o más acentuados.
Según el último estudio de Flat 101 sobre la incidencia del Coronavirus en ecommerces, hay negocios que han visto aumentadas sus ventas en un 70%, mientas que otros han visto reducida esa cifra al 40%.
Todo ello es debido a varios factores que vamos a pasar a ver:
- TOMA DE DECISIONES DEL CONSUMIDOR.
Durante la cuarentena los consumidores hemos variado nuestras prioridades. De un primer momento de abastecimiento masivo hasta un consumo gradual pero con variación en lo que consideramos primordial. Productos como ropa, belleza, deporte o lujo pasaron a un segundo plano.
Poco a poco, y debido al alargamiento del confinamiento, algunos de esos productos comenzaron demandarse. Sin embargo, el comprador tiene ahora más tiempo para decidir y meditar su compra. A mayor tiempo para comparar y decidir, el consumidor deja de lado la compra compulsiva y pasa a ser más maduro y exigente.
- TECNOLOGÍA Y DISEÑO.
Los productos digitales, mejor desarrollados y diseñados, ya registraban datos de conversión mayores antes del coronavirus, por lo que ahora los negocios que invirtieron en esta parcela ven mayores resultados.
No todo el mundo es nativo digital y comprende los procesos de compra dentro de una tienda on-line. Cuanto más claro sea el proceso y se resuelvan las dudas lógicas dentro del mismo, más probabilidades tenemos de aumentar la conversión.
Facilitar la transacción al máximo y hacerla comprensible para cualquier edad y maduración digital es clave. Por primera vez, muchos consumidores están realizando compras on-line, lo que supone un reto tanto para el consumidor como para las marcas.
- COMUNICACIÓN.
Es uno de los factores claves ahora mismo. No basta con indicar que tu negocio sigue activo y abierto.
Los negocios que han logrado aumentar o mantener sus ventas on-line han comunicado los procesos de elaboración, producción y entrega de sus productos con las medidas de seguridad e higiene óptimas.
Ahora los tiempos de entrega no son tan determinantes, pero sí lo es el proceso logístico.
Conocer y tener presente en la tienda on-line, durante el tiempo que dura el proceso de compra, que todo lo que se entrega ha sido manipulado bajo estrictas medidas de higiene; que todo el personal tiene las protecciones adecuadas, y que la entrega se realiza con seguridad, es todo un plus.
Ya no importan tanto tener el producto en 24 horas, sino que su manipulación y entrega sea segura.
- PRECIOS.
Un alto porcentaje de los consumidores han visto mermados sus ingresos, ya fuera por regulaciones de empleo o minoración de ingresos en sus negocios. Esto hace priorizar no sólo en qué gastamos, sino cuánto gastamos.
Algunas marcas han sabido empatizar y comprender este problema haciendo desparecer de sus tiendas on-line los pedidos mínimos, reduciendo costes de entrega o realizando ofertas, que además ayudaban a sacar stock.
- EXPERIENCIA DE CLIENTE. (Customer Experience/CX).
El consumidor valorará objetiva y subjetivamente le proceso de compra desde su fase inicial (comunicación y conocimiento de la marca) hasta su fase final (entrega del producto y servicio post-venta).
Marcas y empresas que optimizaron sus negocios digitales antes del confinamiento ahora ven premiado ese esfuerzo y los recursos que emplearon en ello. Y los consumidores somos gente de costumbres. Nos acomodamos muy pronto a aquello que es rápido, sencillo y eficaz. Por lo que los negocios que ya apostaron por un marketing digital real y efectivo, centrado en los usuarios y sus inquietudes y deseos, lograrán tener clientes más fieles si cabe tras la crisis sanitaria.